¿qué te permitirías hacer?

Durante la exploración y el juego, especialmente durante el juego (y también en la diversión), surgen cosas nuevas e incluso inexplicables para un ser humano "racional". El cual entra en pánico y se siente avergonzado en el momento en que se conecta con la energía creativa. Esa energía que no entiende y no sabe de dónde viene le lleva a pensar o hacer cosas que sólo haría un niño. Así que ese pensamiento "racional", que intenta explicar y juzgar lo que hacemos cuando estamos poseídos por la energía creativa, es el principal culpable de que todo se quede en ideas, simples ideas que nunca llegamos a materializar. Porque son demasiado tontas, imposibles e improbables a los ojos adultos de la razón. Y ahí se quedan todos nuestros sueños y la parte más alegre y auténtica de la vida.

No te voy a mentir, los primeros encuentros directos con la creatividad asustan, dan miedo. Porque significan enfrentarnos con todos nuestros deseos; en especial aquellos que han sido reprimidos por tanto tiempo. Al ser considerados locos, descabellados e incompatibles con nuestro estilo de vida actual. Pero, ¿de quién es esa voz que nos juzga, que nos dice lo que esta bien y lo que esta mal?.

Esa voz tiene muchos nombres, diferentes edades y personalidades. Muchas veces es nuestra y la hemos alimentado por tantos años, que es casi imposible no escucharla. Esta allí todo el tiempo. Obligándonos a comportarnos "como debemos", a "actuar normal", a no expresarnos como queremos. Esto nos lleva inevitablemente a vivir una vida aburrida (que horrible suena eso), donde todo es normal y nada es extraño, interesante o nuevo.

Si tuvieras la oportunidad de pausar, al menos por algunos minutos esa voz, ¿qué te permitirías hacer?